lunes, 5 de diciembre de 2011

LA BASE NAVAL DE GUANTANAMO (Capítulo IV) Continuación


(42)

 
                               Mapa de Cuba , con señalamiento de la Base Naval de Guantánamo 

equitativamente. Hacía dos días que no traían el preciado líquido y había desesperación y mucha preocupación, sobre todo por los niños.
Las personas comenzaron a  aglomerarse en el portón de salida (la única que había). Mas y mas personas llegaban. Comenzaron a forcejear y a empujar, hasta que éste cedió de nuevo. Los soldados se hicieron a un lado. La turba se abalanzó sobre las pipas como buitres en un festín. Era deprimente ver lo que estaba ocurriendo. No había compasión con mujeres, ancianos o niños. Los más fuertes y los más guapos (al menos de lengua) eran los que lograban coger agua. La ley del más fuerte se estaba imponiendo.
Un grupito de desalmados se apoderaron de las “pipas” y sólo cojian agua los socios de los bandoleros que tenían el control de la situación.
El daño mas grande que le ha hecho ese sistema a Cuba, ha sido la pérdida de valores y sentimientos de humanidad y solidaridad que siempre, como pueblo, nos caracterizó. Se estaba viviendo un infierno y algunos actuaban como “diablos”.
Después de la media hora, el agua se acabó. La inmensa mayoría de los dos mil y pico de personas que allí habíamos, nos quedamos sin tomar agua. La desesperación aumentaba.
Dos niños, de 6 a 8 años, salieron con un cartel que decía: “TENEMOS HAMBRE Y SED”.
Los  dos niños se dirigieron hasta la caseta de los militares y, según versiones, uno de ellos empujó a los niños. Esto no me consta, pues no lo vi., pero estoy plenamente convencido de que estos rumores eran falsos. Los soldados son muy cuidadosos con los niños y las mujeres; juegan con ellos y no permiten que los padres le peguen. Personalmente he visto como han reprochado a madres por pegarles a sus hijos.
Este incidente fue inventado por uno de los agentes de Fidel Castro, que se encontraba infiltrado en la Base Naval de Guantánamo. Quisieron enardecer y enfurecer a los residentes del campo, para que actuaran en contra de nuestros guardianes y así  crear una atmósfera internacional en contra del “Imperio Yankee”.
A partir de este suceso, algunas de las personas que se encontraban fuera, comenzaron a apedrear a los militares. Eran unas 100 a 150 persona las que se dedicaban a esta triste tarea. Los mismos que, momentos antes, no permitieron que estos niños bebieran agua.Se hicieron eco de una supuesta “agresión”a los infantes  y salieron en defensa de los que hubieran muerto de sed por su culpa.
Los soldados se cubrían con los escudos y en número de 20 a 25 avanzaban hacia nuestro campamento. La lluvia de piedra era enorme. Avanzaban de forma compacta, pero las piedras  los hicieron retroceder. Muchos escudos se quebraron por el impacto de las rocas y dos soldados tuvieron que ser retirados del “campo de batalla” heridos; uno en una pierna y el otro en la cabeza.
Un grupo de personas habló con los militares, para que trajeran agua. Estos se comunicaron con el boqui-toqui y a la media hora trajeron  2  pipas de agua, las cuales dejaron en la parte de afuera del campo. La gente les gritaba a los guardias para que las entraran y la distribuyeran 

Continuará

Posteado por: "Comité Pro Libertad de Presos Políticos Cubanos"

No hay comentarios:

Publicar un comentario