Hoy, 23 de febrero, se conmemora el primer aniversario del asesinato de Orlando Zapata Tamayo. Hombre humilde, sencillo, trabajador,y que se desempeñaba como albañil. No permitió que sus carceleros lo humillaran y vejaran.
Entró a prisión por un "delito" de desacato, en el mes de marzo del año 2003,y sancionado a tres años de injusto encierro. Su espíritu rebelde y justiciero le fué ganando años a su causa,hasta llegar a 36 años de cárcel. Triste papel el de éstos cancerberos, al ensañarse con este jóven, que solo pedía sus derechos dentro de la prisión como preso político, los mismos derechos que tuvo el sátrapa Fidel Castro, por los sucesos del Cuartel Moncada en 1953.
Los acosos y maltratos que recibió dentro de las ergástulas cubanas por exigir sus derechos, lo obligaron a iniciar una huelga de hambre que duró 85 días.Sus victimarios, para tratar de doblegarlo, le suprimieron el agua durante 18 días, haciendo irreversible su crítico estado de salud. Cuando se decidieron atenderlo medicamente ya era demasiado tarde.
Orlando Zapata murió, pero dejó un legado histórico y sobre todo dejó un comportamiento y una valentía digna, que hoy muchos jóvenes siguen.
Su muerte ha marcado un hito y ha señalado un camino para la juventud cubana
Hoy todo un pueblo lo recuerda saliendo a las calles y gritando: ¡ Zapata vive! Zapata vive !
Se han creado numerosas organizaciones que llevan su nombre y su recuerdo imperecedero esta presente en el pueblo cubano.
¡ Zapata Vive !
¡ Libertad para los presos políticos cubanos !
¡ Para Cuba ya es hora !
¡ Comité Pro Libertad de Presos Políticos Cubanos !
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